Antes de llevar un tratamiento o modificar la dieta para evitar la caída de cabello, lo primero que hay que hacer es el diagnostico de porqué se esta cayendo el pelo, ya que podemos invertir mucho tiempo y dinero sin lograr resultados, si no corregimos la causa base.
Si bien, no hay una dieta que evite la caída de cabello, también es cierto que hay alimentos que harán que tu cabello se repare más rápido, crezca más pronto y luzca más sedoso y brillante.
Proteínas: los aminoácidos de las proteínas de tu dieta son la materia prima esencial para formar los filamentos de tu pelo. Si no ingieres proteínas suficientes porque llevas una dieta muy estricta, eres vegetariana o “quemas” las proteínas que ingieres por hacer mucho ejercicio, tus folículos pilosos no podrán formar nuevos filamentos. Pregunta a tu nutriólogo cual es la cantidad ideal de proteína que debe de llevar tu dieta. Las mejores fuentes de proteína son la carne magra, el pollo y el salmón.
Biotina: es la vitamina B8, y la encuentras en almendras, nueces, pescado, y en casi todas las frutas. Esta vitamina actúa en el ensamblaje de las fibras del pelo. Si falta, el pelo se torna, reseco y quebradizo. La causa mas frecuente de deficiencia son las dietas a base de comida rápida y en las dietas que manden el consumo de huevo crudo.
Oligoelementos: son el Zinc, el magnesio, el cobre y el hierro. Vienen en los cereales, alubias, frijoles, chicharos , las verduras de hoja verde, y los tubérculos como la papa y el camote. Son parte importante de la resistencia y elasticidad de la fibra capilar además de participar en las funciones vitales de las células que forman el pelo. Su deficiencia provoca caída de pelo, seborrea, fragilidad y le da un aspecto sin brillo.
Grasas esenciales: lo que hace que tu pelo se vea sedoso y con brillo, además de darle cuerpo, son las ceramidas. Estas provienen del metabolismo de las grasas que consumimos, en específico de los ácidos grasos esenciales (Omega-3 y Omega-6) que los encontramos en el pescado y en el aceite de oliva, las semillas de girasol, las nueces, los cacahuates, la linaza, etc. Las dietas carentes de ellos hacen un cabello frágil, quebradizo y sin vida.